El madroño (Arbutus unedo L.) es una especie de árbol o arbusto perteneciente a la familia de las ericáceas, que se distribuye por el sur y el oeste de Europa, el norte de África y el oeste de Asia. Su nombre científico proviene del latín arbutus, que significa "árbol de frutos rojos", y unedo, que significa "que solo se come uno", aludiendo al sabor poco agradable de sus frutos.
Nombres comunes
Madroño, Borrachín, Madroñero, Navadna jagodičnica, Madrono, Medronheiro, Albornio, Arboser, Madroñeiro, Madroños, Cirerer d' arboç, Albornial, Erbedo, Meroteiro, Lichi borrachero, Madroñera, Emborrachador, Borto, Madroño común, Madroñal.
El madroño se caracteriza por tener un tronco retorcido y una corteza rojiza que se desprende en placas. Sus hojas son perennes, simples, alternas, elípticas, con el margen aserrado y el haz de color verde oscuro y el envés más claro. Sus flores son blancas o rosadas, pequeñas, con forma de urna y dispuestas en racimos colgantes. Sus frutos son bayas globosas, de color rojo intenso cuando maduran, con una superficie rugosa y con numerosas semillas en su interior. Los frutos son comestibles, pero tienen un sabor ácido y astringente que no es del agrado de todos. Sin embargo, se pueden utilizar para elaborar mermeladas, licores y otros productos.
El madroño es una especie que requiere climas templados y húmedos, con suelos ácidos y bien drenados. No tolera las heladas intensas ni los encharcamientos. Se puede encontrar en bosques mixtos, matorrales, laderas rocosas y zonas costeras. Es una especie muy ornamental, que se utiliza para decorar jardines, parques y calles. Además, tiene propiedades medicinales, ya que sus hojas y frutos tienen efectos antiinflamatorios, antisépticos, diuréticos y antidiabéticos.
El madroño es una planta que forma parte de la cultura y la historia de muchos lugares. Por ejemplo, es el símbolo de la ciudad de Madrid, donde aparece en su escudo junto al oso. También es el emblema de la República de Irlanda, donde se le conoce como strawberry tree (árbol de las fresas). Asimismo, es una planta muy apreciada por las abejas, que producen una miel muy aromática y de calidad con su néctar.